Simposio en AFRA 2023: “Problemas filosóficos, históricos y didácticos en torno a la biología”

San Miguel de Tucumán
20, 21, 22 y 23 de septiembre de 2023

Más información en http://www.afra.org.ar/

Simposio: “Problemas filosóficos, históricos y didácticos en torno a la biología”

Coordinadores: Santiago Ginnobili y Leonardo González Galli

Resumen:

Durante la etapa clásica de la filosofía de la ciencia, en la primera mitad del siglo XX, el trabajo de elucidación conceptual y de reconstrucción a partir de marcos metateóricos comunes era considerado como una de las funciones principales de quehacer filosófico, hasta el punto de constituir el objetivo indiscutible de la mayoría de los investigadores. Asimismo, se consideraba evidente que este trabajo de elucidación y reconstrucción metateórica podía y debía tener consecuencias de alcance más amplio que la discusión puramente interna y académica. Por diversos motivos, algunos de ellos internos, relacionados con la inadecuación de las herramientas metateóricas del empirismo lógico, y otros externos, relacionados con el clima político en Norteamérica durante la guerra fría, estos objetivos de consenso han sido, en buena medida, abandonados en la actualidad. En la filosofía de la biología, la elucidación conceptual y la reconstrucción de teorías han conservado un lugar importante aún luego de la caída de los consensos de la época clásica, aunque, como ha ocurrido con la filosofía de la ciencia en general en todas sus ramas, la profesionalización ha sido acompañada por cierto desinterés por el impacto que los trabajos de elucidación conceptual pudieran tener sobre la sociedad o en la actividad científica. En este simposio se presentarán distintos trabajos de análisis filosófico y de discusión histórico-filosófica de diferentes ramas de la biología, intentando extraer consecuencias interesantes de tales análisis sobre la práctica científica, sobre la enseñanza y comunicación de la ciencia, y sobre cuestiones asociadas a la filosofía práctica.

  1. El papel de las teorías científica en el desarrollo de herramientas en neurociencia. Sergio Daniel Barberis (UNQ-CONICET/UBA/UdeSA)
  2. Incorporación de los aportes de la filosofía feminista de la biología y la historia de la ciencia a la enseñanza de las ciencias naturales: primeros resultados. Federico Nahuel Bernabé (CEFHIC-UNQ/UNAHUR/UNAJ), Grisel Foche (UNAHUR)
  3. Estructura jerárquica de la teoría de las homologías especiales en Richard Owen. Daniel Blanco (UNL, CONICET)
  4. Perspectivas y debates en las neurociencias cognitivas del lenguaje: una revisión crítica en torno al enfoque modularista de la mente en los modelos de doble ruta en la lectura. María Fissore (IDH-CONICET)
  5. El origen de la expresión de las emociones y el antiesclavismo en Darwin. Santiago Ginnobili (CEFHIC-UNQ-CONICET / UBA)
  6. La metáfora del diseño y la selección natural: ¿una metáfora epistémica viva? Leonardo González Galli (CONICET – Instituto de Investigaciones CeFIEC, FCEN, UBA) y Betina Cupo (Instituto de Investigaciones CeFIEC, FCEN, UBA).
  7. Variación ciega y retención selectiva de ideas: un análisis de la propuesta evolucionista de la creatividad. Malena León (UNC-CONICET)
  8. Aportes de la discusión sobre el esencialismo en biología a la enseñanza. Gastón Pérez (Instituto de Investigaciones CeFIEC, FCEN, UBA).
  9. Sobre la eliminabilidad de conceptos funcionales en biología molecular y bioquímica. Ariel Roffé (CEFHIC-UNQ-CONICET, UBA) y Karina Alleva (CEFHIC-UNQ-CONICET, IQUIFIB-UBA).
  10. Explicaciones de linaje funcionales. Nicolás Sebastián Sánchez (UNC-CONICET)
  11. (Meta)ética en clave evolutiva: una revisión del escepticismo metaético de Michael Ruse a la luz de las teorías de proceso dual. E. Joaquín Suárez (UNLP, CONICET)

Resúmenes:

El papel de las teorías científica en el desarrollo de herramientas en neurociencia

Sergio Daniel Barberis (UNQ-CONICET – UBA – UdeSA)

sergiobarberis@gmail.com

Resumen

El papel epistémico de la  innovación técnica en las prácticas de laboratorio se ha constituido recientemente en un tema de interés para la filosofía de la neurociencia. El filósofo John Bickle sostiene diversas tesis controversiales sobre el tema. En primer lugar, afirma que el cambio científico en neurociencia está impulsado exclusivamente por la innovación técnica, esto es, por el desarrollo de nuevas herramientas experimentales. En segundo lugar, afirma que la innovación técnica puede generar y/o constituir una verdadera revolución en un campo neurocientífico. En tercer lugar, afirma que la elaboración de teorías desempeña un papel secundario, o terciario, en el cambio científico revolucionario. El desarrollo de herramientas sería el resultado de la capacidad ingenieril y la experimentación lúdica en el laboratorio exclusivamente, de manera tal que la elaboración de teorías seguiría el cambio científico siempre desde atrás. El filósofo Philip Haueis se opone a la tercera tesis de Bickle. Concede que el cambio neurocientífico puede estar impulsado por la innovación técnica y suspende el juicio sobre el carácter revolucionario, o no, de ese cambio. Sostiene que,  en el caso de los experimentos exploratorios (i.e., aquellos que no se proponen contrastar hipótesis científicas), las normas epistémicas que rigen la formación de nuevos conceptos coinciden, en cierto nivel de abstracción, con las normas que rigen el desarrollo de nuevas herramientas experimentales. Así, el gancho experimental inicial de una nueva herramienta (en términos de Bickle) permite afirmar que un nuevo concepto identifica una “causa de anclaje” en el mundo (en términos de Haueis), mientras que el gancho experimental de segunda fase permite afirmar que el nuevo concepto posee la “textura abierta” necesaria para aplicarse en diversos contextos. En este trabajo me propongo cuestionar ambas posiciones filosóficas defendiendo la idea de que, sea en el desarrollo de nuevas herramientas experimentales, sea en los experimentos exploratorios, la elaboración de teorías desempeña un papel más importante que el previsto por estos autores. Ilustraré la centralidad de la teoría en el desarrollo de herramientas a partir del estudio del desarrollo de la tinción de Golgi, sus ganchos experimentales iniciales y de segunda fase y su relación con las teorías reticularistas y neuronistas del sistema nervioso.   

Incorporación de los aportes de la filosofía feminista de la biología y la historia de la ciencia a la enseñanza de las ciencias naturales: primeros resultados.

Federico Nahuel Bernabé (CEFHIC-UNQ – UNAHUR – UNAJ)

federico.bernabe@unahur.edu.ar

Grisel Foche (UNAHUR)

grisel.foche@estudiantes.unahur.edu.ar

A partir de los años 80 del siglo pasado, la filosofía y la historia de la ciencia se vieron sacudidas por la emergencia de varios programas de investigación que suelen agruparse bajo la etiqueta Filosofía Feminista de la Ciencia (FFC). El particular interés de la FFC por el problema de los valores en ciencia, con especial énfasis en los valores no epistémicos vinculados con el sistema sexo/género, dio lugar a una profunda revisión de las ciencias de la vida, que atañe a las metodologías, las metáforas, las teorías favorecidas y las rechazadas. Así, en los últimos 40 años, la concepción de qué es la ciencia, en qué consiste la objetividad y cuál es el rol que los valores en la toma de deciones científicas se modificó de manera considerable.

El objetivo de nuestro trabajo es proponer un acercamiento entre la literatura producida a partir de la emergencia de la FFC y la enseñanza de la biología que permita introducir la perspectiva de género ante los y las estudiantes de biología en los propios términos en los que las ciencias biológicas se desarrollan. Nuestro diagnóstico inicial es que, en la formación de los futuros docentes de ciencias naturales, los contenidos programáticos relativos a las cuestiones de género suelen figurar como un añadido exógeno a los contenidos teóricos de las disciplinas que deberán enseñar. Eso genera, en muchas ocasiones, una aparente contradicción entre los contenidos “de ciencias” y los contenidos “de género”. Esa contradicción aparente es problemática en dos sentidos: uno conceptual, relativo a la literatura filosófica que muestra la importancia interna de los valores no cognitivos en todos los contextos de la actividad científica y otro pragmático, relativo al impacto pedagógico que genera en los y las futuras docentes de ciencias naturales.

Por ello, propondremos una articulación más significativa de estos núcleos temáticos a partir de algunos casos paradigmáticos analizados por la FFC y la historia de la biología. Presentaremos las propuestas pedagógicas que hemos desarrollado para lograr tal articulación, usando como casos testigos los materiales y actividades desarrollados para las materias de Zoología y Evolución del Profesorado Universitario de Biología de la Universidad Nacional de Hurlingham.

Estructura jerárquica de la teoría de las homologías especiales en Richard Owen

Daniel Blanco (UNL-CONICET)

danielblanco.fb@gmail.com

Parece bastante claro que la base empírica de la teoría darwiniana del origen en común, tal como aparece en Origins (1859), proviene prominentemente de los trabajos que Richard Owen hiciera en el campo de la anatomía comparada, siempre ateniéndose a la clase Vertebrata, durante la década de 1840, en particular, con sus On the Invertebrates Animals (1843), Report on the Archetype and Homologies of the Vertebrate Skeleton (1846) y (especialmente) On the Archetype and Homologies of the Vertebrate Skeleton (1848) y On the Nature of Limbs (1849).

Fuera del crucial aporte terminológico que acabó con la Babel conceptual en el marco de la disciplina mencionada –característica típica de las especialidades científicas en etapas de inmadurez que este científico contribuyó a modificar en este caso–, Owen dedica años de esfuerzo en la elaboración de una teoría de las homologías que distingue tres importantes “similitudes” en la naturaleza:

  • la de las homologías generales, en la que aludirá a su famoso “arquetipo”;
  • la de las homologías seriales, que involucra repeticiones en uno y el mismo individuo; y
  • la de las homologías especiales, que constituirá la aludida porción del mundo que Darwin procurará explicar apelando a la comunidad de origen.

Esta contribución procura iniciar el trabajo elucidativo, desde un enfoque jerárquico de las teorías científicas, de los elementos teóricos que conforman (3), es decir, la teoría que procura determinar las (así llamadas por él) “homologías especiales”, esto es, repeticiones de porciones del esqueleto en distintos individuos de la misma o de distintas especies. Se identifican aquí tres protocolos distintos de determinación, candidatos a conformar las respectivas especializaciones del constructo teórico: el dependiente de la posición, el dependiente de la ontogenia y el dependiente de la histología.

Uno de los corolarios de la contribución sugiere que esta teoría de las homologías especiales (como la de las homologías seriales) no es sino una porción especializada de la teoría de la homología general, versión inglesa de la teoría de la vértebra, de origen alemán.

Perspectivas y debates en las neurociencias cognitivas del lenguaje: una revisión crítica en torno al enfoque modularista de la mente en los modelos de doble ruta en la lectura

María Fissore (IDH-CONICET)

mariafissore8@gmail.com

Hasta finales del siglo pasado, los neurocientíficos consideraban que los procesos neuronales que daban lugar a capacidades cognitivas específicas como el lenguaje se ubicaban en regiones cerebrales altamente selectivas y especializadas. Este tipo de enfoque estaba influenciado directamente por la evidencia empírica proveniente de estudios sobre lesiones cerebrales. Sin embargo, los recientes métodos de neuroimagen han proporcionado evidencia numerosa que sugiere que la localización y especialización no son características centrales de la organización funcional del cerebro. En la actualidad, un conjunto de teorías emergentes sugiere que los procesos neuronales desarrollados inicialmente para ciertos propósitos se “reutilizan” (“reciclan”, “redistribuyen”, “explotan”, etc.,) para otras funciones cognitivas distintas de aquellas por las cuales surgieron en primer lugar, y lo hacen sin perder sus funciones originales. Un ejemplo claro, son los mecanismos neuronales implicados en la lectura: puesto que el surgimiento de los primeros sistemas ortográficos en la historia humana data apenas de unos 5000 mil años, una cantidad de tiempo demasiado escasa en términos evolutivos como para que se hayan desarrollado mecanismos neuronales especializados para la lectura, una posible “salida” a este problema es explicar la adquisición de objetos culturales a través de procesos de “reorientación” o “reciclaje” de circuitos neuronales preexistentes dedicados a funciones similares (Dehaene, 2005, 2009). En el caso de la lectura las investigaciones sugieren que los mecanismos neuronales reciclados para el reconocimiento de palabras escritas se dedicaban inicialmente al reconocimiento visual de objetos y rostros (Dehaene y col., 2010). De esta forma el lenguaje escrito se convierte en un caso paradigmático para el análisis del vínculo entre las adaptaciones adquiridas evolutivamente y los aprendizajes culturales. Por otra parte, en el marco de la neuropsicología cognitiva uno de los modelos de procesamiento cognitivo de la lectura más influyente en la actualidad es el modelo de “palabra aislada” o de “doble ruta” (Coltheart, 1981; Ellis y Young,1992), que consiste en proponer componentes modulares de procesamiento del estímulo lingüístico para la comprensión y producción del lenguaje, ya sea oral o escrito. El objetivo de este trabajo es desarrollar un análisis sobre el supuesto de la modularidad de la mente para las habilidades lingüísticas sobre el que se asienta el modelo de doble ruta de la lectura y sobre el que se han asentado gran parte de las concepciones más influyentes sobre lenguaje y la cognición de la segunda mitad del siglo XX.

El origen de la expresión de las emociones y el antiesclavismo en Darwin

Santiago Ginnobili (CEFHIC-UNQ-CONICET – UBA)

santi75@gmail.com

Usualmente el nombre de Charles Darwin es asociado con su descubrimiento más célebre, la selección natural, pero la verdad es que Darwin inauguró muchos programas de investigación que todavía siguen vigentes relacionados con esta nueva tarea detectivesca. Uno de las más intrigantes, tal vez, lo constituya el estudio de la expresión de las emociones en animales humanos y no humanos. Por una parte, por diferentes motivos discutidos por varios autores, fue una obra que recién se volvió influyente en años recientes, aunque fue publicada cuando Darwin ya era un científico famoso. La segunda razón por la cual el libro ofrece un carácter enigmático, sobre todo para aquellos que asocian fuertemente la figura de Darwin con la selección natural, es que dicho mecanismo no es utilizando casi en absoluto para dar cuenta del origen de las diferentes expresiones.

El objetivo de este trabajo es mostrar el sentido en el cual esta sensación de que el libro sobre las emociones es poco darwiniano no es adecuada. La expresión de las emociones en animales y en los hombres (Expression, en adelante), fue pensado originalmente como un capítulo más de El origen del hombre (Descent, en adelante). Mi objetivo consiste en mostrar que en el marco de los objetivos de Descent es que el libro se muestra profundamente darwiniano. Algunos de tales objetivos son explícitos en la obra, pero otros resultan del trabajo historiográfico sobre textos publicados y no publicados de Darwin. Me interesa específicamente referirme al trabajo de Adrian Desmond y James Moore, quienes mostraron convincentemente que la obra de Darwin en general, y específicamente Descent, tienen una fuerte relación con su posición política antiesclavista.. Intentaré mostrar que los objetivos antiesclavistas también puede encontrarse por detrás de Expression. Pues, puede entenderse tal libro, y especialmente el hecho de que no se apele casi en absoluto a la selección natural, como un intento de mostrar la unidad humana. Pues, las explicaciones de Darwin del origen de las emociones no sólo pueden relacionarse con su punto de vista monogenista y con la cercanía entre las diferentes razas humanas, sino que, además (con los objetivos de  Descent de trasfondo) tiene implicaciones respecto a las capacidades mentales de las diferentes razas. En este punto, como veremos, resulta especialmente interesante la explicación darwiniana del origen del rubor.

La metáfora del diseño y la selección natural: ¿una metáfora epistémica viva?

Leonardo González Galli (CONICET – CeFIEC-FCEN-UBA)

leomgalli@gmail.com

Betina Cupo (Instituto de Investigaciones CeFIEC-FCEN-UBA)

Al ofrecer reconstrucciones formales de las teorías de la biología la filosofía de la biología puede realizar significativas contribuciones a diversos campos, entre ellos la filosofía, la didáctica y la propia biología. En el caso de la teoría de la selección natural (TSN) existen numerosas propuestas de tales reconstrucciones conceptuales. Sin embargo, persisten numerosos debates en relación con tales reconstrucciones. Un tópico de gran interés y poco abordado en estos análisis es el relacionado con el rol de las metáforas en las teorías. En la filosofía de la ciencia existe un debate al respecto. En un extremo tenemos autores que sostienen que las metáforas son elementos meramente instrumentales que no forman parte de las teorías: solo sirven a fines comunicativos, heurísticos o retóricos. En el otro extremo, otros autores defienden que algunas metáforas al menos son parte intrínseca y no eliminable de las grandes teorías. En esta línea, Michael Ruse sostiene que la metáfora del diseño es parte de la TSN en el sentido de que esta última no puede utilizarse sin echar mano de la primera. Sin embargo, Ruse no ofrece un análisis formal de la TSN que permita comprender con precisión en qué sentido y con qué consecuencias una metáfora como la del diseño forma parte de dicha teoría. La noción de metáfora epistémica propuesta por Héctor Palma podría ser de utilidad ya que, por definición, se trata de metáforas que forman parte de los fundamentos de las grandes teorías. Sin embargo, la caracterización que Palma ofrece de estas metáforas no parece ajustarse al caso de la metáfora del diseño y la TSN. Según este autor, las metáforas epistémicas tienen un origen histórico en el cual su uso supone una tensión de significados, pero luego, mediante el proceso de lexicalización, devienen en “metáforas muertas”, desapareciendo la tensión de significados inicial. Este sería el caso, por ejemplo, de las metáforas informáticas en la biología, tales como la de “código genético”. Sin embargo, en el caso de la metáfora del diseño y la TSN la tensión de significados pareciera persistir, lo que se evidenciaría en la ambigüedad e incomodidad con la que los biólogos utilizan los términos que la expresan (adaptación, fitness, función, etc.). En esta ponencia presentaré esta discusión y argumentaré que la elucidación metateórica de estos problemas sería de gran valor para la enseñanza de la biología.   

Variación ciega y retención selectiva de ideas: un análisis de la propuesta evolucionista de la creatividad.  

Malena León (UNC-CONICET)

malenacaradebuena@gmail.com

Existen múltiples cruces teóricos entre biología evolutiva y cultura. En el campo de las teorías de la creatividad, dicho cruce ha dado lugar a las teorías evolucionistas de la creatividad (Campbell, 1960, 1974; Simonton, 1999, 2009). Estas teorías, enmarcadas dentro del «darwinismo secundario» (Cziko, 1995), utilizan la teoría de la evolución de las especies para comprender la creatividad. Basándose en el éxito del modelo darwiniano para explicar el surgimiento de las especies, se extrapola este enfoque al estudio de los logros creativos. En líneas generales, estas teorías sugieren que cuando un individuo se enfrenta a un problema o busca crear algo nuevo, genera ideas de manera aleatoria y selecciona aquellas que mejor se ajustan a sus objetivos. Cuando una idea resulta ser original y funcional, se considera un resultado creativo. Este proceso implica variación ciega y retención selectiva.

Además, por otra parte, existe un campo científico que estudia el cambio cultural desde una perspectiva evolutiva. Según este enfoque, la cultura cambia siguiendo principios darwinianos (Mesoudi, 2011). Lo que las teorías de la evolución cultural comparten con la biología evolutiva es el concepto de “pensamiento de poblaciones” (Baravalle, 2017).
En este trabajo se realiza una reconstrucción y evaluación de la propuesta evolucionista de la creatividad. Se retoman los puntos clave de la propuesta de Campbell y cómo Simonton la desarrolla. A continuación, se presentan las principales críticas recibidas por este enfoque (Dasgupta, 2004). Aunque ha habido diversas críticas, la mayoría se centran en objetar que la variación ciega y retención selectiva sea el único mecanismo implicado en los procesos creativos. Sin embargo, el compromiso básico de que algunos fenómenos creativos pueden explicarse mediante mecanismos selectivos darwinianos no ha sido refutado.

Por último, se plantea una tercera crítica que enriquecería la teoría. Desde esta perspectiva, las teorías evolucionistas de la creatividad limitan la selección de ideas al nivel de los individuos, mientras que, al igual que en las teorías de la evolución cultural, se podría considerar que esta selección también puede ocurrir a nivel de poblaciones.



Aportes de la discusión sobre el esencialismo en biología a la enseñanza

Gastón Pérez (CeFIEC-FCEN-UBA).

gastonperezbio@gmail.com

El esencialismo puede entenderse como una forma de explicación que utilizan las personas, con un alto poder retórico. Involucra distintos supuestos tales como asumir categorías discretas, un desprecio de la variabilidad inherente a los miembros de la categoría (lo que deviene en la construcción de estereotipos), una suerte de determinismo explicativo que refiere a que los miembros de la categoría son cómo son debido a una esencia inmutable que comparten. Diversos filósofos sugieren que la teoría darwiniana ha terminado con el esencialismo en la biología, en tanto se establece una incompatibilidad entre éste y las clasificaciones modernas, así como con los modos de entender a las poblaciones de organismos. Hoy en día, ser acusado de esencialista es ser anticientífico, antidarwinista, racista, entre otras. Sin embargo, otros filósofos sugieren que el esencialismo sobrevivió al darwinismo, entendido no de manera taxativa sino con algunas diferencias en cuanto a los supuestos que se cumplen y la diversidad de formas de esencialismo que pueden existir. Las clasificaciones que se realizan desde la taxonomía, la sistemática, la genética o la biología evolutiva, cumplirían con algunos de los supuestos del esencialismo más no con otros. Pero también, el esencialismo guiaría los modos en los que los científicos buscan cuáles son las propiedades constitutivas, por ejemplo, de las distintas especies del mundo. Esta propuesta se condice, a su vez, con los modelos de la psicología cognitiva que explican cómo funciona la mente humana. Las personas intuitivamente utilizamos el razonamiento esencialista para ordenar el mundo en el que vivimos y construir explicaciones sobre individuos en base a las categorías a las que pertenecen. Abordar la complejidad del razonamiento esencialista en la enseñanza permitiría poner en cuestionamiento qué significan las clasificaciones que elaboran los biólogos cuando investigan en temas tales como la ancestría genética o la estructura genética de la población humana, apelando así a poner en evidencia la cuestión del racismo en las investigaciones. Distinguir cuáles de los supuestos del esencialismo se cumplen en cada caso, ayudaría a los estudiantes a profundizar la comprensión de los modelos científicos que subyacen a estas temáticas, a la vez que se reflexiona sobre los modos en los que se construye este conocimiento.

Sobre la eliminabilidad de conceptos funcionales en biología molecular y bioquímica

Ariel Roffé (CEFHIC-UNQ-CONICET – UBA)

ariroffe@hotmail.com

Karina Alleva (CEFHIC-UNQ-CONICET – IQUIFIB-UBA)

karina.alleva@gmail.com

El debate sobre la naturaleza del lenguaje funcional ha ocupado un lugar central en la filosofía de la biología. Se trata de una cuestión que implica preocupaciones metafísicas entrelazadas con el intento de comprender la apelación a conceptos funcionales en la práctica científica. Dejaremos de lado las cuestiones metafísicas y nos centramos en la comprensión de la atribución funcional en biología molecular y bioquímica. Más concretamente, nuestro objetivo es elucidar los criterios de aplicación de los conceptos funcionales a productos génicos en biología molecular y bioquímica.

Las razones para centrarnos en estas áreas son variadas. En primer lugar, los profesionales de estas áreas han mostrado interés por comprender su propia disciplina. Además, se ha producido una acumulación exponencial de conocimientos funcionales y estructurales sobre un gran número de proteínas, así como una acumulación de genomas secuenciados de diferentes especies. Esta situación requiere herramientas que faciliten la comunicación entre la enorme (y creciente) comunidad científica que trabaja en estas diferentes especies. Esto ha llevado al desarrollo de herramientas computacionales específicas, como Gene Ontology, que asumen explícitamente algunos marcos conceptuales relativos a las funciones para categorizar sus grandes cantidades de datos.

Nuestras tesis principales serán que (i) La búsqueda de definiciones explícitas de conceptos funcionales está ligada a la preocupación metafísica de eliminar la teleología; (ii) Esta búsqueda es, en muchos sentidos, análoga a la búsqueda de definiciones explícitas de conceptos teóricos por parte de los empiristas lógicos; (iii) De forma similar a lo que los empiristas lógicos encontraron para los conceptos teóricos, los conceptos funcionales en biología no están, de hecho, explícitamente definidos. Examinando dos estudios de caso, mostraremos que la atribución funcional implica aplicar diferentes criterios de operacionalización, ninguno de los cuales proporciona condiciones suficientes ni necesarias para la atribución, y que a veces pueden chocar entre sí. En cambio, ofrecen «condiciones necesarias débiles» o síntomas de que un rasgo posee una función determinada.

El resultado general de este debate será que no debemos preocuparnos por «salvar» a la biología de su aparente «caída» en el teleologismo. En cambio, si se trata el concepto de función de forma similar a cualquier otro concepto científico de cualquier otro campo, surge una visión más adecuada de la práctica científica. Que esa práctica sea teleológica o no será, en cualquier caso, un resultado de la discusión.

Explicaciones de linaje funcionales

Nicolás Sebastián Sánchez (UNC-CONICET)

nssanchez.unc@gmail.com

La noción de explicaciones de linaje fue propuesta (Calcott 2009) como una caracterización metateórica de explicaciones provistas en biología del desarrollo. Esta aproximación delinea una secuencia transformativa (Currie 2021: 11) que rastrea la trayectoria fenotípica de un rasgo. Permiten explicar de este modo, por ejemplo, el desarrollo filogenético de un ojo, desde su forma primitiva como un punto sensible a la luz hasta la forma de lente que adquiere en humanos y otros vertebrados. Estas trayectorias se rastrean a través de distintas etapas y manteniendo constante algo que el sistema hace, con el fin de comparar cómo lo hace -en el caso del ojo, la capacidad relevante es la agudeza visual. El valor de esta clase de explicaciones yace en los pequeños cambios del sistema a través de las distintas etapas. Kim Sterelny ha hecho uso de la idea de una explicación de linaje con el fin de proveer una explicación gradual de las capacidades de los homínidos para la cultura acumulativa (Sterelny 2012, 2021), rastreando este rasgo desde un punto en el que el sistema tiene capacidades básicas para el aprendizaje social hasta otro punto en el que hay adaptaciones para el aprendizaje cultural. En este sentido, su tesis central es que una explicación de linaje permite un estadio intermedio en el que no hay adaptaciones para el aprendizaje cultural pero aún así hay un incremento significativo en el desarrollo de las capacidades para el aprendizaje social. Al proveer una caracterización metateórica de su aproximación, Sterelny afirma estar proveyendo una explicación de linaje. Sin embargo, menciona una diferencia con respecto a estas que considero central y configura el tema central de la presente presentación. A saber, su explicación del aprendizaje cultural se enfoca en ‘especificaciones de desempeño’ (Sterelny 2012: xiii) antes que en la descripción de mecanismos del sistema. Las especificaciones de desempeño para una capacidad X son precisiones funcionales respecto a qué otras cosas debe el sistema hacer para poder hacer X (Dennett 2017). En esta presentación, me centraré en las diferencias entre las explicaciones de linaje ‘originales’ y las que utiliza Sterelny, o explicaciones de linaje mecanísticas y funcionales. Así, evaluaré las consecuencias, en cuanto a la caracterización metateórica, que resultan de poner el foco no en rasgos biológicos de un sistema para los cuales hay una explicación mecanística sino en otras capacidades donde esa descripción no está disponible.

(Meta)ética en clave evolutiva: una revisión del escepticismo metaético de Michael Ruse a la luz de las teorías de proceso dual

E. Joaquín Suárez (UNLP-CONICET)

ejsuarezruiz@gmail.com

Aunque la posición de Michael Ruse es metaética es escéptica, defiende la importancia de las éticas normativas tradicionales. Su defensa resulta bastante contrastante para con los enfoques tradicionales: las éticas normativas son ‘ilusiones efectivas’ porque, aunque no tienen fundamentos objetivos, están basadas en ‘disposiciones mentales innatas’ que han sido favorecidas a lo largo de la evolución. De allí que las comprenda como una ilusión ‘efectiva’, por el hecho de que, a pesar de que en realidad no existen criterios éticos objetivos, tendemos a creer que sí los hay. En esta argumentación hay un supuesto fuerte a nivel de la psicología moral: el fundamento de las disposiciones mentales innatas que favorecen los comportamientos altruistas está ligado a un orden más intuitivo o emocional que a uno racional. Las éticas normativas no serían sino racionalizaciones de esos sentimientos altruistas subyacentes.

En esta ponencia, luego de una exposición de las características de la metaética evolutiva escéptica de Ruse, se las analizará a la luz del modelo intuicionista social de la formación de juicios morales de Jonathan Haidt. Haidt se inscribe en una corriente de la psicología moral basada en las teorías de proceso dual. De acuerdo con estas teorías, la mente posee dos modos de funcionamiento básicos. El primero puede ser denominado ‘cognición intuitiva’ (‘sistema 1’), y supone modos de pensamiento rápidos, no regulados conscientemente y fáciles (no requieren un gran esfuerzo en términos cognitivos ni fisiológicos). El segundo puede ser llamado cognición razonada (‘sistema 2’) e implica modos de pensamiento lentos, conscientemente motivados, regulados y esforzados. Siguiendo a Gigerenzer (2018) y Gilovich (2009), el sistema 1 está formado en gran medida por numerosos sesgos cognitivos o heurísticas que guían el razonamiento rápido para la toma de decisiones. El sistema 1, por tanto, estaría en sintonía con las ‘disposiciones mentales innatas’ de las que habla Ruse.

Con el fin de problematizar el supuesto de la metaética evolutiva ruseana, y luego de exponer las características básicas del modelo intuicionista social de Haidt, se introducirá la consideración de un ‘Sistema 3’, de estudio reciente en las teorías de proceso dual  y relacionado con la metacognición, para defender que, incluso desde una perspectiva de la moral en clave evolutiva, el rol de la racionalidad puede no limitarse a una mera racionalización de intuiciones.